La novela Concierto Barroco, que constituye sin duda un prominente clímax en la obra de Carpentier, combina de manera ejemplar la estética barroca con la concepción de "lo real maravilloso". La novela se publicó por primera vez en 1974, en una edición limitada y en un formato especialmente elegante, después de muchos años de trabajo de investigación rigurosa y de una ardua labor de escritura por parte de su autor. La trama, que se desarrolla a principios del siglo XVIII, describe el periplo a Europa de un acaudalado mexicano, descendiente de conquistadores españoles que se establecieron tiempo atrás en América. En camino al continente, el Amo mexicano visita La Habana, donde conoce a Filomeno, un negro libre, descendiente de esclavos africanos, que se convierte en su leal sirviente y compañero de viaje. Después de llegar a Madrid, siguen camino a Barcelona ​llevando una ruta que, en gran parte, corresponde a la de Don Quijote y Sancho Panza. De este puerto los dos continúan hasta llegar a uno de los destinos más ansiados de los viajeros europeos de la época: Venecia en tiempos de Carnaval.

 

En el apogeo de las festividades, se topan los dos con tres alegres músicos: Vivaldi, Haendel y Scarlatti. Después de una inolvidable velada musical con las pupilas de Vivaldi en el Ospedale della Pietá, el Amo y Filomeno son invitados a escuchar una nueva ópera del Prete Rosso en uno de los famosos teatros locales. La trama de la ópera, centrada en la historia de la toma de Tenochtitlán por Hernán Cortés, se titula "Motezuma". El Amo contempla y escucha la presentación con estupor y se siente ofendido en lo más profundo de su alma, al apreciar con sus ojos americanos la distorsión de la historia tal y como se presenta en este escenario europeo.

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Ante el trasfondo de los encuentros y desencuentros personales y culturales de todos estos personajes en el contexto de la atmósfera musical única de Venecia, Carpentier crea una trama divertida, erudita y compleja en la cual se reexaminan todos los temas centrales de su pensamiento y en particular su énfasis en el carácter singular  del continente americano, como lugar de encuentro de lo antiguo y lo nuevo, y de tres culturas diferentes – europea, africana e indígena. Además esta trama se convierte en plataforma ideal para desarrollar la estética barroca que para él fundamental a cualquier intento serio de representar esta realidad.  

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Hablando en términos históricos, Vivaldi efectivamente compuso la ópera "Motezuma", y ésta se presentó por primera vez en Venecia en 1733. Haendel y Scarlatti también se conocieron en realidad en Venecia, y ello sucedió en 1708. Los dos probablemente también conocieron a Vivaldi allí. Jugando con los tiempos como en muchas otras de sus obras, Carpentier conecta lo posterior con lo anterior como parte integral de lo real maravilloso en su novela. Este es tan sólo uno de los recursos literarios que Carpentier teje en la novela, la cual empezó a concebir en 1967 después de haber escuchado por primera vez sobre esta ópera de Vivaldi. Gran conocedor musical, Carpentier se sorprendió de la existencia de una obra barroca que trataba temas americanos, que hasta entonces había pasado desapercibida. Se las arregló para conseguir una copia del libreto, que se preservó en su integridad, y basó la trama de la novela en él. Sin embargo, no llegó nunca a ver la partitura de la ópera, y mucho menos llegó a escucharla. Dicha partitura se consideraba irrecuperablemente perdida, hasta que una copia casi completa de ella se encontró en un archivo remoto en Berlín en 2002. A continuación, la ópera se produjo por primera vez en 2005 en Rotterdam. La historia del descubrimiento de las notas y la restauración de la ópera después de tantos años dada por perdida podría servir de base a una nueva novela de Carpentier, pero el caso es que Carpentier logró, basado únicamente en su imaginación y en lo que leyó en el libreto, recrear en Concierto Barroco la atmósfera de la ópera. En esta obra literaria única, la búsqueda de la representación de "lo real maravilloso" alcanzó uno de sus momentos más sublimes.